Mucha gente repara en el detalle de que Fernando Villalona se ve otro…Quienes le conocen advierten que es otro hombre.
Un artista muy diferente al de otros tiempos en que la fama, la popularidad, la inexperiencia y los vicios le empujaron a ser otra cosa.
Su proceso de transformación se le atribuye a la madurez.
Pero yo digo que una parte importante de esta etapa se debe a que hoy día se encuentra al lado de una gran mujer, con el perdón de otras distinguidas damas a las que quizás, o sin quizás, les tocó vivir con él sus años más turbulentos, porque la verdad debe ser dicha
Fátima Vicioso, a quien la conozco desde los tiempos en que formaba parte en Puerto Rico del grupo Punto G, sin duda alguna se ha convertido en un soporte importante en la vida actual de El Mayimbe.
Una mujer que le hacía falta. Que cuida con esmero de todos sus detalles. Que no es una ”malditaloca” que anda detrás de su fama, de su popularidad ni de su fortuna.
Que se desvive en atenciones hacia su hombre en su casa y que lo demuestra en los muchos detalles en que siempre lo tiene presente.
Ella es el complemento esencial que le hacía falta al Mayimbe en los años en que las hojas comienzan a secarse, por el inevitable paso del tiempo.
Dichosos aquellos que en el transcurrir de los años, pueden encontrar la paz espiritual, emocional y sentimental en el regazo de una mujer como ella, ya sin necesitar de ”mecerse en la hamaquita de Juanita”.
Y es que con Fátima, el Mayimbe tiene ”cama y mesa”…Lo de él con ella no es un asunto de ”tabaco y ron”…”Cuántas veces” tendré que decirlo?.
Un artista muy diferente al de otros tiempos en que la fama, la popularidad, la inexperiencia y los vicios le empujaron a ser otra cosa.
Su proceso de transformación se le atribuye a la madurez.
Pero yo digo que una parte importante de esta etapa se debe a que hoy día se encuentra al lado de una gran mujer, con el perdón de otras distinguidas damas a las que quizás, o sin quizás, les tocó vivir con él sus años más turbulentos, porque la verdad debe ser dicha
Fátima Vicioso, a quien la conozco desde los tiempos en que formaba parte en Puerto Rico del grupo Punto G, sin duda alguna se ha convertido en un soporte importante en la vida actual de El Mayimbe.
Una mujer que le hacía falta. Que cuida con esmero de todos sus detalles. Que no es una ”malditaloca” que anda detrás de su fama, de su popularidad ni de su fortuna.
Que se desvive en atenciones hacia su hombre en su casa y que lo demuestra en los muchos detalles en que siempre lo tiene presente.
Ella es el complemento esencial que le hacía falta al Mayimbe en los años en que las hojas comienzan a secarse, por el inevitable paso del tiempo.
Dichosos aquellos que en el transcurrir de los años, pueden encontrar la paz espiritual, emocional y sentimental en el regazo de una mujer como ella, ya sin necesitar de ”mecerse en la hamaquita de Juanita”.
Y es que con Fátima, el Mayimbe tiene ”cama y mesa”…Lo de él con ella no es un asunto de ”tabaco y ron”…”Cuántas veces” tendré que decirlo?.
Publicado por Joseph Caceres
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