viernes, 20 de mayo de 2011

Paulina Rubio confesó en muchas ocasiones que uno de sus más grandes placeres es beber tequila. Sin embargo, desde el nacimiento de su bebé ha parado.


Paulina Rubio confesó en muchas ocasiones que uno de sus más grandes placeres es beber tequila. Sin embargo, desde el nacimiento de su bebé hace seis meses, la cantante mexicana ha tenido que “bajarle la dosis” y cuidar un poco más su organismo.
“No bebo tequila como antes, porque soy una mamá y tengo que darle el pecho a mi niño. Soy su alimento”, expresó en la presentación de la edición especial de una marca de tequila diseñada para la firma francesa Domecq.
La cantante, habituaba beber en festejos, dijo que le “gusta hacerlo en momentos claves”. Rubio acostumbra cambiar la tradicional rodaja de limón con la que se acompaña la bebida por una de naranja y añadirle un poco de chile piquín.
La intérprete también habló de grastronomía, al señalar que emplea el tequila como condimento y señaló que su plato favorito son los “camarones gigantes tequileados”.
Paulina señaló que se encargó de diseñar la botella de esta marca de tequila tomando los colores que definen su vida y su personalidad: “azul, por el cielo y el mar, fucsia, por ser mi color preferido, morado como símbolo del rock y círculos por el pop que me han dado tantos triunfos en la música”.

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