viernes, 20 de diciembre de 2013

Gloria Trevi esta que hecha humo, una publicación afirma que lucra con la imagen de su hija fallecida, Ana Dalai, pidiendo dinero a pesar de que ésta ya no existe.

La cantante Gloria Trevi esta que hecha humo,  y es que una publicación afirma que lucra con la imagen de su hija fallecida, Ana Dalai, pidiendo dinero a pesar de que ésta ya no existe.
Según el Diario Basta:
“La Fundación Ana Dalai, organización altruista presidida por Gloria Trevi desde 2005, opera ilegalmente.
A pesar de que desde principios de mes aparece como “inactiva” en una base de datos del gobierno estadounidense, ésta continúa la colecta de donativos a través de su sitio web que, entre otros contenidos, presenta una carta en la que la cantante exhorta a hacer las aportaciones en pro de los niños nacidos en prisión.
Documentos obtenidos por BASTA! en territorio estadounidense, sitio donde se constituyó la fundación en 2005, hacen constar que la empresa Ana Dalai Fundation se encuentra como “inactiva” desde el pasado 3 de diciembre, situación que contrasta con la página electrónica anadalai.
org, en la que hasta la mañana de ayer se convocaba a convertirse en patrocinador y se daba detalle de las ventajas de ser benefactor de la asociación altruista.
“Donaciones individuales sin valor mínimo, ventajas fiscales, notoriedad, prestigio, promoción de imagen”, (sic) se lee.
Según el mencionado sitio, la última actividad realizada por la fundación tuvo lugar a finales de mayo de 2012, gracias a una visita de Trevi al Cereso de Chihuahua. Antes del evento se refieren otras actividades realizadas en el mismo mes en ciudades como Tijuana. Cabe destacar que entre 2008 y 2012 existe un gran vacío de actividades o al menos del registro histórico de éstas. Por su parte, la cuenta de Twitter de la fundación no registra movimiento desde el pasado 22
de abril.
Pero la Trevi no se quedo callada,  y sorprendentemente en vez de responder con una demanda como suele hacer utilizo su cuenta de Twitter para contestar a esta acusación.

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