Julio Iglesias compareció en Higuey ante un juez de la instrucción por espacio de una hora y media, sin que ninguno ofreciera declaraciones a la prensa sobre lo tratado.

El cantante español Julio Iglesias compareció ayer ante un juez de la instrucción por espacio de una hora y media, sin que ninguno ofreciera declaraciones a la prensa sobre lo tratado.

El juez Juan Carlos Morales se negó a ofrecer detalles sobre el encuentro que sostuvo en su oficina con Iglesias, quien llamó la atención a su llegada al Palacio de Justicia, a las 9:30 de la mañana.

El artista arribó acompañado de dos guardaespaldas y su chofer, procedente de Punta Cana, donde reside desde hace años como parte de los inversionistas del grupo Punta Cana.

Silencio del juez
Al ser preguntado por este redactor, el magistrado Morales declinó ofrecer detalles.

Según fuentes extraofi ciales, la reunión estaría relacionada a un caso por el que el artista es requerido para que comparezca y responda a una alegada demanda que se le formulara por supuesto incumplimiento de contrato de un concierto en Chipre (un país euroasiático).

El cantante tendría que responder ante los tribunales de Miami a la denuncia de Net Holding, un conglomerado turco de empresas turísticas, que le acusa de deberle 280,000 dólares (195,000 euros), cifra que Net le habría pagado como adelanto por un concierto que iba a protagonizar en noviembre pasado en el Hotel Merit en Kyrenia, una localidad turística de Chipre.

Tras la presión realizada por la prensa griega, Iglesias canceló el concierto, pero según Net, no devolvió el dinero.

“Nuestras pérdidas superan el millón de dólares”, se quejaba el Holding ante la prensa. Aparentemente lo presionaron a que cancelara el concierto por la inestabilidad del gobierno.

Luego, en febrero, el representante de Julio dijo que él no demandaría a nadie por este asunto, y que ya había devuelto el dinero que les habían pagado por el show. Desde entonces no habían salido nuevas informaciones relacionadas a ese proceso que parecía haber concluido.

(+)
UN CASO PENDIENTE DE ACLARAR EN ESPAÑA
Un juzgado de instrucción de Valencia, España, busca desde hace casi dos años a Julio Iglesias para que dé cuenta de un concierto que ofreció hace ya más de 14 años en Orlando, concretamente el 14 de abril de 1998. Con la gira, habría cobrado casi seis millones de euros, que pagó la Generalitat Valenciana a través del Instituto Valenciano de la Exportación, reportó la prensa española. El caso salió a relucir esta semana porque el 7 de julio él ofrecerá un concierto a apenas 300 metros del tribunal.
listin diario