Más temprano sostuvo un encuentro con periodistas en donde habló sobre sus planes profesionales para luego Dj Tito Bernard servir de telonero en el concierto.
Hay que resaltar que Sarah dejó impresionada a la audiencia que abarrotó el Lite Lounge, un confortable club que se unió al esfuerzo de esta joven artista que no tiene límites al pasear por la bachata, el pop, el merengue y otros géneros urbanos.
Basta escucharla, como así aconteció en su debut, con la versión rockera que hizo de la célebre canción “Ojalá”, para darnos cuenta de sus posibilidades en escena.
En la ocasión presentó su primer álbum “Sarah for the world”, un compilado de temas cuidadosamente escogidos. Su voz limpia, armoniosa y apasionada conjuga a la perfección con el género por el cual ha apostado: la bachata.
La actuación inició con una breve introducción biográfica de Sarah y acto seguido irrumpieron un cuerpo de bailarinas de belly dance que marcaron la entrada de la protagonista que se hizo acompañar de una orquesta compuesta por reputados músicos dominicanos.
Así sobrevino primero “Tu sentencia final”, sencillo al que le hizo un video y ha significado su carta de presentación en la radio y televisión.
Hay que destacar la manera en que se entrega Sarah al público, sus desplazamientos en el escenario, su presencia y sus cualidades interpretativas le proporcionan una justa valoración a su talento.
Es una propuesta fresca y diferente a la que tendremos que ponerle atención a partir de ahora.
Su estilo, en contraste con el doble sentido erótico-sexual, al que con frecuencia suelen recurrir los tradicionales intérpretes, apela por entero a demostrar su impronta musical, estableciendo una inigualable y refrescante manifestación artística y profesional.
"Sarah for the world", constituye una muestra de los recursos y valores de esta artista.
Más de ella
Sarah María Graciano (nombre completo) incursionó desde pequeña en la música animada por su madre, quien, según sus propias palabras “quería canalizar esas energías” que Sarah tenía.
En “La Casa de la Cultura” de La Vega estudió guitarra y se inició en el canto, movida por su profesor, para que se pudiera “acompañar” en el instrumento.
Participó en festivales intercolegiales, luego en presentaciones de Piano Bar, hasta formar parte del Grupo Fusión.
“A partir de ahí decidí dar el salto y lanzar mi primera producción”, cuenta.
Este álbum contiene 9 temas, entre 2 merengues y una balada, producidos por José Antonio Hernádez.
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