La salida del empresario artístico José Tejeda del negocio en Nueva York fue un golpe letal para el merengue, la bachata, los grupos típicos y los artistas.
José Tejeda es el padre del éxito del merengue, la bachata y los grupos típicos dominicanos que hasta hoy en día suenan y se bailan por todas partes.
De ser un gran periodista, se convirtió en un excelente productor de conciertos.
Inteligente, visionario, organizado, trabajador, dinámico, buen hijo, buen amigo, buen padre y un orgullo de su familia y su generación.
Solidario, sencillo, respetuoso, un inversionista de alta visión en el entretenimiento.
Le dio al merengue personalidad y puso a la capital del mundo, Nueva York, y a casi todos los estados de los Estados Unidos a bailar todos los veranos y los inviernos nuestra música nacional.
Creó una merenguemanía en los más míticos escenarios de la ciudad que nunca duerme.
Desde el legendario Madison Square Garden, pasando por las salas más importantes de la nación americana, como Radio City Music Hall, el Carnegie Hall, el Teatro Lincoln Center, el Teatro Edickson, el centro de eventos Rowsland, y todos los salones de fiestas de los hoteles 5 estrellas.
Llevó el merengue a todos los centros de diversión más majestuosos de Nueva York, Boston y a las ciudades más importantes de Estados Unidos. Hasta logró ponerlo en la Casa Blanca.
Las más impresionantes giras de verano con récords que sobrepasaban las 20 mil personas para el lago en Nueva York hicieron historia.
La salida y la entrada a la Ciudad de Nueva York se paralizaba por horas, y todos los medios norteamericanos cubrían por aire, mar y tierra ese hecho sin precedente con merengue y salsa.
Llegó un momento en el que era normal ver a los bomberos y la policía de la ciudad parando la entrada a los bailes del productor más brillante de Nueva York en toda su historia.
El legendario Happy Hill Casino, Casa Borinquen, Casa Blanca, El Palediund, El Caborojeño, Estudio 84 de su propiedad, y todas las discotecas, salones de clubes e incluso iglesias fueron parte de la historia de cómo la ágil y dinámica visión de José Tejeda catapultaron hasta el día de hoy el merengue como el ritmo líder en Nueva York y en todos los estados donde se baila música latina en la Unión Americana.
Este éxito de las orquestas se sentía aquí en el país porque los que llenaban allá aquí reventaban los lugares, eso pasó en Miami, Puerto Rico, Venezuela, Colombia y en todo el mundo.
Los periódicos de mayor credibilidad, las estaciones de radio y noticieros más influyentes de la tv y de importancia para la sociedad americana se vieron obligados a darle cabida al merengue por su rotundo éxito.
Cuando decidió retirarse José Tejeda, dejó el ritmo en el tope de la popularidad y la bachata y el merengue típico listos para despegar.
José Tejeda fue siempre el empresario que tenía los pies en la tierra y la cabeza en el cielo: en su época impactó el medio artístico cuando logró que El Mayimbe Fernandito Villalona y su orquesta cantaran sus éxitos del Merengue en el majestuoso Hotel Plaza de NY para el Presidente de los Estados Unidos George Bush y a los Reyes de España durante la entrega de la medalla especial de Oro en su despedida a Javier Pérez de Cuéllar, quien fue el primer Secretario General de la ONU de habla hispana.
De igual forma logró que Aramis Camilo y su orquesta actuaran con gran éxito en la cena especial de la gala en el majestuoso Museo Metropolitano de New York en un evento dedicado a celebridades del jet set de Hollywood encabezado por el modisto de fama mundial Oscar de la Renta y la presencia del canciller norteamericano Henry Kissinger.
Tejeda continuó colocando el merengue en la cima del éxito y logró que por primera vez se celebrara un concierto de Merengue en la Alcaldía de NY con la actuación de El Zafiro, Bonny Cepeda, Aramis Camilo, Ray Polanco y Jochy Hernández.
Su visión y emprendimiento siempre fueron por más y logró que por primera vez llegara el Merengue al legendario Beacon Theatre con el noveno Carnaval del Merengue tres días consecutivos a casa llena.
Puso al corazón del Times Square en Nueva York a bailar en el famoso ROSELAND que fue invadido por más de 7 mil personas que bailaron los éxitos del Merengue hasta las 5 de la madrugada con una constelación de estrellas como Wilfrido Vargas, Los Kenton, Johnny Ventura, Milly y los Vecinos, Fernando Villalona entre otros.
Organizó otros tipos de eventos como el Primer festival del niño en 1985 en Madison Square Garden con la asistencia de 20 mil personas y otras 5 mil niños no pudieron entrar con Chespirito, Luis Miguel, Chayanne, grupo Parchís de España y la Dominicana Glenys Díaz.
Tejeda dio un salto hacia las máximas estrellas de las baladas y en el año 1985 cuando ya el Merengue tenía el primer lugar en el gusto de las gentes comenzó un nuevo concepto de conciertos con una constelación de mega estrellas de fama internacional quienes firmaron un acuerdo con José Tejeda, para presentarse en los más famosos escenarios neoyorquinos: Camilo Sesto, Emmanuel, Julio Iglesias, José, Juan Gabriel, Rocío Jurado, Ana Gabriel, Isabel Pantoja, y en el género SALSA con su compatriota el creador de Fania, el santiaguero Johnny Pacheco, abrió además una línea nueva para impulsar a todos los merengueros y grupos típicos y a los Bachateros encabezados por Johnny Ventura, Wilfrido Vargas, Fernandito, los Hermanos Rosario, el Torito, Conjunto Quisqueya, Fefita la Grande, el Cieguito de Nagua, Los Kenton, Bonny Cepeda, Anthony Santos, Luis Vargas, entre otros muchos que fueron representados por el muy exitoso José Tejeda.
José Tejeda y su visión de ver negocios diferentes logró traer a la República Dominicana a equipos de béisbol de Grandes Ligas contratando para jugar en República Dominicana a los Dodgers de Los Angeles Vs. New York Mets, Cardenales de St. Louis Vs. Filis de Filadelfia; años 1977 y 1978 jugaron en Santo Domingo, Santiago y San Francisco de Macorís.
El que crea su propia línea de talentos, con visión, con pasión, con amor, con fe y mucha esperanza, será un triunfador.
Hay que hacer siempre un gran esfuerzo para lograr las metas y así pasar a la historia con méritos suficientes para ser un inmortal de la dimensión de un gigante llamado José Tejeda.
Fuente listin diario
No hay nada mas ingrato que los merengueros dominicanos. Especialmente aquellos de los 70s y 80s. No hubo NI UNO solo que se ha solidarizado con el legado de Don Jose. Y mira que Jose los hizo millonarios a todos, a ganar en dolares grandes en los 80s. Deberian hacerle una estatua o declarar un dia en su nombre.
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