Por Joseph Caceres
En cambio, si los anunciantes son Importadora El Hoyito, Cediflor, Cool Bar, Makumba, Discotecca Wao de la Avenida Venezuela, debe saber que ahí no hay nada qué buscar...$$.
Si los anuncios son de Superintendencia de Bancos, Turismo, Banco Central, Obras Públicas, Salud Pública, Presidencia de la República, ya se debe imaginar qué tipo de programa es...Como dice el eslogan: ¿Quién te patrocina?.
Si en un programa aparece un banner diciendo que fulano o fulana viste de tal tienda, una promoción de ropa o maquillaje hecho con discreción, cuente y asegure que en ese programa hay carácter, distinción y categoría.
Si en cambio, aparece una fulana haciendo "excelentes recomendaciones", diciendo que su ropa es de sutanejo, sus accesorios son de mengarejo, su peinado de perencejo, y los panties que lleva puestos son de mingarejo, no hay que ser muy inteligente para caer en cuenta de que es una comunicadora y un programa barato de esos que intercambian hasta la sonrisa sin ningún rubor ni pena.
Sin contar aquellos que en medio de una entrevista brindan con una copa de vino, y llegan al colmo, y al extremo, de no solo agradecer mil veces el brindis a la casa patrocinadora, sino que ponen al invitado a hacer propaganda con una botella en la mano. ¡Bárbaros!. ¡Por una botella de vino, y del barato!.
Por suerte ya Tito Campusano no está en el aire, que anunciaba moteles de San Isidro por intercambio en Sábado Espectacular.
Y no es que no hace haga, pero todo debe ser con discreción...No se puede abaratar tanto la imagen con anuncitos de poca monta, que a final de cuentas no resuelven el problema de pagar un espacio.
Anuncios que azaran, y que no dejan entrar a los grandes, si quisieran hacerlo como una ayuda, para no equipararse a la baratija.
Hay productores y dueños de programas que se quieren mantener a base de intercambios, y así no es...

No todo el mundo es Julito Hazim que con los electrodomésticos que conseguía por intercambio llegó hasta a montar una tienda donde los vendía.
¡Ese si sabe del negocio!.
O el difunto Yaqui Núñez en su tiempo, que cuando hacía un intercambio con un restaurante, ¡hasta lo quebraba!, con todo el mundo comiendo bueno, incluyendo el personal de sus programas. ¡Ay José Luis El Gago!
Diferente a los intercambios que hacían los muchachos de La Opción de las Doce, que tenían uno con el restaurant La Finca, del fenecido Chuchú Ortiz en La Venezuela, que cuando pedían camarones, no había...chillo, no había...langosta, no había...filete, no había...Lo único disponible era cocido, mondongo, patica y sancocho. ¿Vas a seguir?.
Nosotros hacíamos intercambios, cuando producíamos TV Revista, pero era con todos los buenos restaurantes del hotel Jaragua, donde llevábamos a todos los integrantes del elenco, que comían y bebían y bueno. ¡Porque no es que no se hagan., sino cómo se hacen!.
¿Cuántos carros Honda Civic no conseguimos nosotros por intercambio con agencia Bella, nuevecitos de paquete, que anunciábamos en El Show de Johnny Ventura, la Alegría del País y El Show del Mediodía, cuando teníamos nuestra sección de espectáculos en ellos?. ¡Carros, no baterías ni gomas usadas, como los de Yoryi!.
Eso si, teníamos que emburujarnos con Bellapart, en negociaciones que hasta el mismo Johnny Ventura tenía que participar, porque nos lo querían cobrar dos veces.
Por eso podemos decir que está fuerte estar haciendo intercambios por un "completo" y un jugo de lechoza con leche en la barra Payan.
¿Y es fácil?
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