Aquí tenemos de nuevo a la señora Bekcham con su habitual cara de nada, saliendo de un almuerzo de negocios en el restaurante Scott de Mayfair. Negociar no sé si negoció mucho, pero la atención informativa no está en sus negocios sino en sus piernas, a las que os pido les echeis un vistazo.
El efecto piernas arrugadas de la señora Beckham es descrito por los cirujanos plásticos como Creeping y aparece cuando el peso corporal del paciente se reduce tanto que la grasa no cubre suficientemente las extremidades provocando esas arrugas en la piel. Pero también aparece cuando se pasan muchas horas al sol, como pasan los Beckham en California, motivo por el cual me inclino bastante más.
Durante mucho tiempo he tenido que aguantar las portadas en las que aparecía la señora Beckham, sus gestos, sus modales, sus colecciones de ropa, los chirridos que salían de su boca cuando cantaba y sus bolsos pero creo que ya he llegado al límite. No tengo por qué aguantar estas imágenes de Victoria, que a pesar de estar más arrugada que una pasa perdida en el desierto, aún se atreve a lucir las piernas como si de una Beyonce o una Christina Hendricks se tratara.
Entiendo que con el carácter que debe tener la diva, David no se atreva a decirle lo que piensa todo el mundo, pero no estaría mal que alguna persona lo suficientemente cercana que dispusiera de casco y escudo protector, le dijera a Victoria que no es guapa, que tiene menos glamour que un ajo en una tortilla de patatas y que sus diseños los podría hacer cualquier bebé antes de salir de útero materno.
fuente hiperpop
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