Hace 10 años que no venía al país a promover su música. Y, ciertamente hay un cambio en Elvis Crespo, el inquieto y enérgico merenguero puertorriqueño que nació en los brazos del baile, y luego descubrió que podía cantar y más tarde que podía escribir.
Han pasado 20 años, desde aquel primer disco que lo llevó a la cúspide e hizo que todo en su vida cambiara. “Suavamente” hizo de Elvis Crespo un merenguero pujante y un compositor que ama escribir e inspirarse de la cotidianidad. Así nació este éxito musical que a lo largo de 20 años sigue siendo un clásido del merengue, capaz de sonar en cada fiesta y discoteca fuera y dentro de Puerto Rico. Tras su salida de Grupo Manía, el intérprete de “Píntame” elaboró un disco a escondidas de su disquera, Sony, porque, en ese momento “sólo tenían ojos para Grupo Manía”.
Un hombre maduro
“Sin embargo, no tengo rencor, eso pasó y ellos estaban muy pegados”, cuenta Elvis Crespo en entrevista con LISTÍN DIARIO.
““Hoy lo que debemos es preocuparnos en hacer contenido”. “El artista tropical de los 80 y 90 no lo entiende”..”
ELVIS CRESPO Artista
El tema surgió luego de una noche de juego de playstation con su hijo Cuquito y de repente al salir del baño tarareó el estribillo que lo llevó a cima: “Suavemente bésame, que quiero sentir tus labios besándome otra vez”. El merenguero logró una carrera, despacio, pese a que su primer disco en solitario se convirtió en un éxito musical. “Con este disco se imprimieron 50,000 copias con la intención de que se vendieran unas 30,000 y la disquera se sorprendió, porque se vendió todo”.
Al día de hoy el merenguero boricua sigue recibiendo importantes ganancias por escribir e interpretar “Suavemente”. Un tema que ha puesto a grandes figuras a mover el esqueleto, como Oprah Winfrey, y que ha sonado en series tan importantes de la televisión estadounidense como House of Cards.
“Claro que Suavemente ha sido rentable. Ese tema cambió mi vida. Yo muy agradecido de que la nevera de mi casa yo la pueda llenar, gracias a este gran éxito musical”, sostuvo Elvis.
Hoy tras muchos años de situaciones personales y familiares, de crecimiento en lo espiritual, Elvis es otro, más maduro y capaz de admitir esos errores del pasado, como cuando se peleó con Banchy, líder de Grupo Manía. “Ahora somos hermanos y nos tiramos en el piso a reírnos de lo sucedido”.
De igual manera, ya no sólo trabaja por la competencia y un éxito musical. “Yo no puedo ser egoísta. La competencia agota, hay que aceptar el éxito ajeno.
Fuente Emelyn Baldera
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