Luego de la dolorosa muerte de su esposa Alma Guzmán (de 85 años) a causa del cáncer de colon que padecía, Joaquín Cordero (de 90) entró en una profunda depresión y pese al consuelo de sus 3 hijos: Antonio, Gabriel y David, y sus amigos, se sentía muy solo.
Por lo anterior decidió internarse en La Casa del Actor, a la cual ingresó el miércoles 16 de enero y donde al día siguiente nos recibió muy amablemente. Con la voz entrecortada, nos contó los difíciles momentos por los que atraviesa.
El primer actor confesó que sin su mujer se siente "completamente perdido y agotado anímicamente […] Hice un pacto con ella, le dije que viniera por mí, aunque seguramente no le han dado permiso y por eso no ha venido. Pero estoy seguro que pronto tendré el gusto de reunirme con ella (llora)”.
fuente TV notas
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