Tras el saludo, la primera ministra danesa se alejó hacia su lugar en la mesa de reuniones, mientras que Berlusconi aprovechó que estaba de espaldas para volverse y bajar la vista para mirarle el trasero.
El gesto del primer ministro italiano fue captado por las cámaras del Consejo de la UE y resaltado de inmediato por varios medios de comunicación de su país
Este no es el primer episodio de este tipo protagonizado por Berlusconi, de 75 años, implicado en multitud de escándalos en su país por su sexualidad desbocada, hasta el punto de que su exesposa llegó a insinuar que el magnate es adicto al sexo.
En septiembre del 2009, el primer ministro italiano saludó de forma muy efusiva a Michelle Obama en la recepción de la cumbre del G-20 en Pittsburgh (EEUU), un gesto que alcanzó gran repercusión en los medios estadounidenses.
El mes pasado, además, trascendió una conversación telefónica de Berlusconi con un editor de prensa en la que el mandatario italiano calificaba a la cancillera alemana, Angela Merkel, de "trasero grasiento".(
No hay comentarios.:
Publicar un comentario