Lo de Omega no tuvo comparación anoche en la apertura del Festival de Música Latina.
No le importó que estuvieran Juanes y Don Omar como las grandes atracciones del evento. El Jefe fue él, y de qué manera, padre mío.
Exhibió una expectacularidad que ningún otro artista tuvo en su despligue, desde la llegada volando de un lado al otro del escenario, con un extraño pero llamativo atuendo transparente, con mallas de bailarina y unos pantaloncillos blancos que dejan atrás todas las excentricidades de Toño Rosario en el vestir.
Hasta con su peinado a lo Elvis Presley el inefable Omega se robó el show.
Quién iba a decir que este artista, (impensable dos años atrás en la tarima del mayor espectáculo artístico popular del país), iba a la fecha a tener una categoría tan espectacular y trascendental como la que vimos anoche en el Estadio Olímpico?.
Omega estuvo fuera de serie!.
La categoría que la producción del evento le dio a este artista surgido de las raíces mismas del pueblo, se pudo ver cuando en el techo de las graderías del estadio, a mitad de su actuación, fue encendido un letrero gigante con su nombre a base de fuegos artificiales, mientras en el cielo se desplegaban luces de bengala, confiriéndole una dimensión única a su actuación.
En ello la gente de la Cervecería Nacional Dominicana y su producción se llevan todas las palmas, pues no se pensaba que a un criollo le iban a dar ese tratamiento tan grande y espectacular.
Lo de Omega en escena no fue el simple show o set de baile a que nos tienen acostumbrados la mayoría de los merengueros cuando están en un espectáculo de tarima, que se limitan a tocar los temas de su repertorio. No. Omega llevó al festival una producción muy llamativa, donde incluyó un segmento dedicado a Michael Jackson, con unos bailarines y un imitador que era una fiel copia del fenecido rey del pop.
Había que ver a ese ‘’clonador’’ haciendo los temas de Michael, con su célebre paso “monwalk” en Billy Jean, y lo mucho que le gustó esa parte al público, a manera de intermedio, en lo que el mambero se cambiaba de vestuario.
La relevancia de Omega fue de tal magnitud, que un rapero internacional de tanta popularidad como Pitbull fue uno de sus invitados, con el cual cerró su show cantando el famoso tema “I Know You Want Me” que tiene letras del El Cata.
Y en un acto poco usual entre los artistas dominicanos, cuando Omega llamó a Pitbull a escena, pidió que también entrara El Cata, y los tres cerraron el segmento con el “one, two, three, ella quiere su rumba..”.
Alguien comentó que Juan Luis no lo hubiera hecho así, lo cual hasta cierto punto se entiende, pues los artistas, en su egocentrismo, no permiten que otros de sus compañeros compartan sus momentos estelares y de gloria, sobre todo si son del patio.
Más Omega, sin ser uno de esos artistas "intelectuales", dio de ese modo un ejemplo de compañerismo y de humildad que le permiten incrementar su nivel de imagen pública.
Publicado por Joseph Caceres
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