La belleza venezolana-americana, quien ha sido injustamente criticada por la apariencia de su cuerpo, se desnuda para propagar el mensaje de la crueldad que existe en la producción de pelaje. En su sensual campaña, presume sus curvas y declara, “Orgullosa de no vestir pieles: Prefiero estar desnuda que vestir pieles”.
Tras ser nombrada Miss Venezuela y Miss Universo, Alicia sabe un par de cosas sobre sexapil—y es un hecho que el pelaje, ¡no es sexy! “Cuando se cría a un animal para matarlo, para hacer ropa, es algo monstruoso”, dice. “[El pelaje] es algo sumamente cruel y creo que es la demostración más grande de frivolidad y de superficialidad que puede tener un ser humano”. Los abrigos, forros y adornos de piel les causan un sufrimiento terrible a los animales, y finalmente, les costará la vida.
Los animales de las granjas de pelaje, pasan sus vidas enteras hacinados en sucias jaulas de metal, en donde los privan de todo lo que es natural e importante para ellos. Para asesinarlos y quitarles sus pelajes, los trabajadores de estas granjas emplean los métodos más baratos y crueles, entre estos métodos se encuentran la electrocución, asfixia, gas y veneno. Más de la mitad de la piel que ingresa a los EE.UU. es importada de China, en donde millones de perros y gatos son colgados, golpeados y a menudo desollados vivos. Las etiquetas de muchos proveedores internacionales no especifican de que animal proviene el pelaje, así que no hay forma saber de quién es la piel que llevas puesta.
Por suerte, “hay grandes empresas que hacen un material hermoso que parecen pieles,” dice Alicia. Con tantas alternativas, nunca ha sido más fácil dejar la crueldad a un lado y vestir faux fur o pieles sintéticas.
Tú, como Alicia, ¡puedes ayudar a los animales comprometiéndote a no comprar ni vestir pelajes! . PETA LATINA
Tras ser nombrada Miss Venezuela y Miss Universo, Alicia sabe un par de cosas sobre sexapil—y es un hecho que el pelaje, ¡no es sexy! “Cuando se cría a un animal para matarlo, para hacer ropa, es algo monstruoso”, dice. “[El pelaje] es algo sumamente cruel y creo que es la demostración más grande de frivolidad y de superficialidad que puede tener un ser humano”. Los abrigos, forros y adornos de piel les causan un sufrimiento terrible a los animales, y finalmente, les costará la vida.
Los animales de las granjas de pelaje, pasan sus vidas enteras hacinados en sucias jaulas de metal, en donde los privan de todo lo que es natural e importante para ellos. Para asesinarlos y quitarles sus pelajes, los trabajadores de estas granjas emplean los métodos más baratos y crueles, entre estos métodos se encuentran la electrocución, asfixia, gas y veneno. Más de la mitad de la piel que ingresa a los EE.UU. es importada de China, en donde millones de perros y gatos son colgados, golpeados y a menudo desollados vivos. Las etiquetas de muchos proveedores internacionales no especifican de que animal proviene el pelaje, así que no hay forma saber de quién es la piel que llevas puesta.
Por suerte, “hay grandes empresas que hacen un material hermoso que parecen pieles,” dice Alicia. Con tantas alternativas, nunca ha sido más fácil dejar la crueldad a un lado y vestir faux fur o pieles sintéticas.
Tú, como Alicia, ¡puedes ayudar a los animales comprometiéndote a no comprar ni vestir pelajes! . PETA LATINA
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