Picoteando el Espectaculo
SANTO DOMINGO. Tony Almont forma parte de una élite de rockeros dominicanos que nunca ha tirado la toalla. Este año cumple 29 años de trayectoria en ese género.
En su tránsito por la escena se preocupó por convertirse en una opción para el público que conocía sus canciones. “Desde muy pequeño fui fan de la música. Cuando se me presentó la oportunidad de estar en las Olimpíadas de Rock no lo pensé dos veces... de hecho ganamos allí. Posteriormente nos formalizamos porque comenzaron a llegar solicitudes, a la par del apoyo que recibíamos de cuatro emisoras que nos daban espacio”, recordó.
“En este tiempo nos hemos planteado desarrollar un proyecto en solitario sin dejar Toque Profundo y este año hemos arrancado a promover la canción Suele pasar, un tributo a una de las mejores composiciones alternativas de todos los tiempos en nuestro país, la cual fue interpretada originalmente por la agrupación La SiemBra, de Pablo Cavallo, David Almonte y Yoryi Rodríguez,”, aseguró el artista a DL.
Gracias a la colaboración de David Taveras hicieron un trabajo que quedó como lo esperaban. Para sustentar la promoción grabaron un video en Boston, Estados Unidos, bajo la dirección de Joryy Cruz y producción de Ralph Joseph.
Concierto
El 22 de este mes protagonizará un concierto en Cinema Café. Allí aprovechará para presentar varios temas como solista. “El concierto se titula Suele pasar y allí haremos temas nuestros, así como de otros artistas dominicanos e internacionales, con versiones propias”, dijo.
Retos
El repertorio de Almont está lleno de canciones sociales. El artista expresó que el mundo estuvo transitando senderos positivos para el cambio, sin embargo se ha producido un revés. “La elección de Barack Obama fue una gran esperanza para el mundo, con un discurso distinto, pero entramos en un retroceso mundial. El populismo se hizo presa de muchas sociedades como la nuestra. Le damos mucho valor a la apariencia, dejando de lado el fondo”.
Criticó que muchos jóvenes apelen a un marco de referencia negativo. “Ya el político no es un referente positivo. En la música por ejemplo hay muchas propuestas que carecen de poesía, de arte. Eso denota que la gente quiere destronar el arte puro. Ahora lo que vale es lo grotesco. Nuestro reto es tratar de elevar la calidad y trabajar con bajo perfil porque esta sociedad ya no aguanta un político corrupto más, una chapeadora más, un antihaitianismo más... vamos a implosionar sino hay una mejoría de progreso, de honestidad...”, dijo.
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