El campo de golf de Hard Rock Hotel de Punta Cana se llenó a toda capacidad para recibir a dos grandes de la música hispana: Alejandro Sanz y Juan Luis Guerra, quienes juntaron sus voces para ofrecer el sábado un concierto inolvidable.
El público llegó temprano al encuentro pautado para las 8:00 de la noche. El artista español hizo su aparición media hora después para ofrecer sus mejores canciones, haciendo un recorrido por una diversidad de mezclas de ritmos.
Solo había interpretado tres temas cuando sorprendió a los asistentes con la salida al escenario de Juan Luis Guerra para juntos cantar “Desde cuándo”, uno de los éxitos del disco “Paraíso express”, de Sanz.
El cantautor español desempolvó algunas de sus más viejas canciones, pero no faltaron esas recientes y otras no tan nuevas que sus seguidores corearon, entre ellas “Quisiera ser”, “Mi soledad y yo”, “Corazón partío”, “No es lo mismo”, “No me compares” y “La música no se toca” (estas dos últimas de su más reciente CD).
En dos oportunidades Sanz se refirió a la situación política que atraviesa Venezuela y aprovechó para transmitir su solidaridad.
Orgullo para los dominicanos, Chris Hierro, hijo del merenguero Henry Hierro, fue anunciado por el cantante para que presentara a los miembros de la agrupación, en la que otra dominicana toca la trompeta.
Sanz volvió a expresar su admiración por Juan Luis cuando dijo que sentía envidia de los presentes que en breve disfrutarían del artista dominicano.
Juan Luis puso el sabor
Alejandro Sanz se despidió a la 10:00 de la noche cuando el público se preparaba para disfrutar al célebre dominicano, quien salió al escenario media hora después.
Alejandro Sanz se despidió a la 10:00 de la noche cuando el público se preparaba para disfrutar al célebre dominicano, quien salió al escenario media hora después.
Como era de esperarse Juan Luis puso sabor a la noche con sus pegajosos merengues, bachatas, sones y salsas.
El artista inició con “A pedir tu mano”, “La bilirrubina”, “Ojalá que llueva café” y un medley de salsa.
En esta ocasión interpretó una diversidad de éxitos de su larga discografía, transportando al público por diferentes etapas desde la década de los 90 hasta hoy.
Para sorpresa de los presentes, Alejandro Sanz también salió al escenario a cantar junto a Guerra la bachata “Te regalo una rosa”.
Como siempre, el artista dominicano aprovecha el escenario para dejar sus mejores mensajes y previo a interpretar “Mi bendición”, de su disco “A son de guerra” (2010), expresó: “Llevo treinta años de casado. El que no ama a su esposa no se ama a sí mismo.
Esta canción la compuse a mi esposa Nora”. Los presentes lo respaldaron con un fuerte aplauso.
La descarga musical incluyó la bachata “Como abeja al panal”, “El Niágara en bicicleta”, “Visa para un sueño”, “Bachata en Fukuoka”, “La guagua va en reversa”, “En el cielo no hay hospital” y “La cosquillita”.
Con este tema Juan Luis se despidió. El público pidió “otro y otro”.
Entonces regresó para cantar “La travesía”, un medley con estrofas de “Estrellitas y duendes”, “Frío frío” y “Burbujas de amor”.
El adiós definitivo fue a ritmo del merengue “Las avispas”.
Larga vida
Hace unos meses Juan Luis interpretaba el tema “Esto es vida” junto a Robi Draco Rosa, de su disco recopilatorio.
Relató que mientras cantaba el tema sintió que debía decir “larga vida a Robi” y pidió al público que gritara “larga vida a Robi”. El artista puertoriqueño se encuentra recuperándose en Los Ángeles de un cáncer en el estómago y por eso no pudo ser parte del concierto como se anunció en un principio. Creyente en Dios, su colega dominicano le declaró la sanidad durante el concierto en Punta Cana.
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