Natasha Crown es una modelo sueca que rompe los paradigmas. Su obsesión por las cirugías plásticas y el aumento de su trasero, le han ganado una fama mundial de la que ella está orgullosa.
Actualmente la nativa de Gothenburg presume unas caderas de 69 pulgadas, pero esa increíble medida se trata simplemente del principio, pues no piensa detenerse luego de tres cirugías.
De acuerdo con Daily Mail, Crown no solo se aprovecha del bisturí para incrementar el volumen de sus asentaderas, también se vale de las calorías comiendo todos los días grandes cantidades de helado de chocolate y cenas ricas en grasas.
“Cuando tenía 20 me hice mi primer retoque y sí, podría decir que estoy obsesionada”, expresó en declaraciones que recoge el tabloide británico.
Por más extraña que parezca su afición, ella se declara orgullosa y bella. Al mismo tiempo aceptó que lo primero que hace todas las mañanas es mirarse el trasero.
“Quizá tengo dismorfia corporal o algo así, pero no siento que es suficientemente grande (su trasero). Definitivamente quiero más”, agregó.
La rubia alista una nueva visita al quirófano, pues es pilar de su autoestima:
“Creo que mi trasero me hace sentir poderosa, adoro mi cuerpo”, concluyó.
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