Yolanda Saldívar cumple una condena de cadena perpetua por el asesinato de la cantante Selena Quintanilla, un 31 de marzo de 1995. Después de más de dos décadas recluida en la prisión Mountain View en Gatersville, Texas, la mujer de 56 años asegura que su vida es un infierno.
Univision tuvo acceso a una demanda de Saldívar en la que acusa a las autoridades carcelarias de omisión luego de que sufrió una caída de su litera que le ha causado “dolor, sufrimiento, lesiones físicas y estrés emocional”.
La nativa de San Antonio aseguró que había pedido a los custodios que no la ubicaran en la parte alta de la cama debido a su baja estatura, sin embargo la ignoraron.
Exlíder del club de fans de Selena, Saldívar exige a las autoridades $500,000 dólares por el calvario que ha vivido, ya que acusó a los celadores de “mal juicio, despreocupación y actos sádicos”.
La cadena recordó que esta no es la primera vez que la asesina sale a la luz pública para revelar el sufrimiento que vive tras las rejas, en 2005 expresó en una entrevista que prácticamente estaba aislada y bajo amenazas: “Nadie se junta conmigo, cuando voy al recreo voy sola, voy al baño sola, se ha dicho que muchas prisioneras quieren hacerme daño”.
Este año se conmemoraron 22 años de que la reina del Tex-Mex fue baleada por Saldívar que de fan escaló hasta su círculo más íntimo, y la agredió fatalmente tras una acalorada discusión, aunque siempre ha negado que tuviera la intención de matarla.
La agresora apeló su condena en 2016 y sería hasta 2025 que pudiera ser elegible para una liberación anticipada.
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