New York, (SL) -Pobres hay en todas partes del mundo e incluso en las grandes ciudades de las potencias económicas y New York no es la excepción de esa realidad, sobre todo entre los latinos que allí se han radicado en busca de mejor forma de vida.
Para quienes estamos al tanto de la realidad económica, de las carencias y viacrucis que enfrentan nuestras escuelas y estudiantes en República Dominicana, nos resulta una insensatez cuando leemos titulares donde nuestros artistas para hacerse los graciosos se dedican a regalar a quienes más facilidades tienen de adquirir las cosas.
No porque al dominicano de la gran manzana le sobra el dinero, sino porque tanto el sistema norteamericano como diferentes instituciones comunitarias, facilitan vías para que la educación en todo su conjunto se encuentre garantizada, sin importar el estatus socio-económico.
Existen fundaciones radicadas en el país y en el extranjero que se preocupan cada año en adquirir vía donaciones y/o compras, los más básicos útiles escolares para ser utilizados por nuestros estudiantes de escasos recursos, útiles que en RD su valor económico resulta una carga para las familias pobres, pero que en Estados Unidos su valor es de centavos, caso similar ocurre con los juguetes.
Si usted como artista dominicano, quiere mostrar su buena voluntad y/o hacer un bulto en la gran manzana, convoque a la prensa y muéstrele lo que su gira le permitió adquirir para ser regalado a los más necesitados de su campo o país, pero no continúe llevando leche donde sobran las vacas.
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