lunes, 21 de abril de 2014

“En primera fila”, de Franco de Vita hubo de todo o casi. Un espectáculo que nunca dejó al espectador distraerse.

En el concierto “En primera fila”, de Franco de Vita hubo de todo o casi. Es decir que aparte de la buena interpretación de los músicos, las entrañables letras de las canciones del autor venezolano, unido a su carisma y buen humor, se trató de un espectáculo que nunca dejó al espectador distraerse. 
Con una banda de 9 músicos y un corista, De Vita (Caracas, Venezuela, 1954) llegó al escenario de Altos de Chavón a las 9:42 de la noche del pasado sábado para dar un paseo por los grandes éxitos que han poblado su discografía en los últimos 30 años.
Versátiles arreglos, que movieron las obras del cantautor de un género a otro con una facilidad impresionante. De esta manera de la balada pop al rock, y de ahí a lo tropical.
Uno de los detalles interesantes del concierto es el hecho de que se su último disco, excusa de la gira, lo ha realizado con la colaboración de distintos colegas. 
“Me estoy metiendo en grandes problemas porque estoy haciendo muchos duetos, entonces, claro, como haces luego para traer a estos artistas a los conciertos”, dijo una de las primeras veces que se dirigió a la audiencia, que no quiso perderse su presentación.
En respuesta a esto, el espectáculo se auxilió de recursos tecnológicos como en la canción “Que no muera la esperanza”, que interpreta con el puertorriqueño Wisin, cuya voz e imagen aparecieron en video.
De igual manera, cuando tocó el turno a “Y tú te vas”, tema que canta con el mexicano Carlos Rivera, este apareció en una pantalla led sentado junto a De Vita, como si estuviera presente. 
En los otros casos, lo acompañaron cantantes de cuerpo presente como el dominicano Eddy Herrera, quien hizo la canción “Te veo venir soledad”; con los venezolanos  Alejandro y Luiggi hizo “Si la ves”, con Gusi “Ya lo había vivido”. 
El repaso por sus temas abarcó más de una veintena de canciones, en las que para que los que asistieron estuvieran complacidos. Es por esto que realizó un variado en el que hacer un poco de varios de estos. “Lo que se llama un popurrí, vamos, eso que hacía la Billo’s Caracas Boys”, dijo haciendo referencia a la orquesta que tenía el dominicano Billo Frómeta en Venezuela.
De esta manera hizo canciones como “Será”, “No hay cielo”. En esta etapa hizo “Contra vientos y mareas” en tiempo de country (banjo y violín incluidos), y “Solo importas tú”, con un arreglo de blues.
Otro momento divertido fue el momento de presentar la banda cuando hacían la canción “Latino”, que pertenece al álbum “Extranjero”, de 1990. En este segmento los músicos mostraron que, aparte de ser buenos en la ejecución de sus respectivos instrumentos. 
La visita a nuestro país de Franco de Vita, un músico que llegó con su inseparable piano, y el sonido del saxofón en varios de sus temas más representativos, terminó la presentación con los temas “Un buen perdedor” y el retrato social llamado “No basta”. Un concierto que se agradece porque se hace música con vida en un momento en el que este género está tan deshumanizado.
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LA LLUVIA NO DAÑÓ LA FIESTA

El merenguero Eddy Herrera no fue la única figura del medio artístico dominicano que compartió escenario con Franco de Vita ya que cuando, como parte del show, llamó a una chica del público para cantar “Tan solo tú”, que grabó con la mexicana Alejandra Guzmán, subió la actriz y presentadora Hony Estrella, quien se llevó los aplausos del público que gustó de su interpretación.. “Santo Domingo, gracias.  Y gracias por tener un lugar tan especial como este, Altos de Chavón”, comentó a los presentes, en un escenario que fue mojado por la lluvia que calló minutos antes de que comenzara el espectáculo.
Un concierto en el que los músicos tuvieron, además de mostrar su talento a la hora de tocar, sino que también enseñaron su lado más divertido. 
Ejemplo de ello fue cuando el baterista tocó con una escalera de aluminio y tres tanques de plásticos, o cuando el pianista mostró la facilidad de pasar de lo clásico a lo tropical y en el instante en el que el percusionista puso a tocar a los tramoyas.

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