El hombre descubrió que el término novia tóxica puede llegar a costarle la lengua
Dicen que para el amor no hay límites; sin embargo, el caso de Adaia López Esteve, una joven modelo española de 24 años, demostró que ser una novia tóxica puede ser un tema de alto riesgo, incluso en algo tan simple como el último beso.
De acuerdo con El Español, Adaia conoció a un hombre de 42 años oriundo de Barcelona, a través de una aplicación para citas; desde el primer momento se enamoraron.
Como toda relación, termina la época de luna de miel y comienzan los conflictos, pues el mal carácter de Adaia empezó a generar constantes problemas en la relación.
Medios de Terragona señalaron que la joven comenzaba a tener ataques de ira y era sumamente violenta cuando discutían. Por esta situación, el hombre, cuya identidad se mantiene en el anonimato, decidió terminar la relación por lo sano.
Último beso de su exnovia tóxica
A pesar de que Adaia López Esteve le pidió una segunda oportunidad y prometió cambiar, las cosas no duraron mucho tiempo antes de que volviera a mostrar su agresivo carácter, por lo que decidió terminar tajantemente.
Fue a mediados de 2017 cuando Adaia abandonó la casa que compartía con su pareja, le rogó por una última oportunidad, pero él no accedió, por lo que pidió un último beso.
Por los buenos tiempos, este hombre aceptó sin imaginar que ese sería su peor error, pues Adaia lo besó al estilo francés y lo mordió tan fuerte que le arrancó parte de la lengua.
Segundos después, la alocada mujer escupió el trozo y se fue, dejando a su exnovio desangrándose. A pesar de la dramática situación, sus vecinos descubrieron lo ocurrido, por lo que lo auxiliaron en lo que llegaba una ambulancia.
El hombre fue trasladado a un nosocomio local en el que pudieron coserle la lengua, pero perdió parte de sus papilas gustativas a causa de este último beso.
Lo hice en ‘defensa propia’: Adaia
Una semana después de los hechos, Adaia fue arrestada por las autoridades; sin embargo, quedó en libertad tras pagar una fianza.
Luego de que este hombre la denunció penalmente, ahora enfrenta un juicio en el que podría ser condenada hasta con diez años de prisión por el brutal beso.
En su defensa, ella aseguró que su exnovio la sometió a todo tipo de abusos, al señalar que sus deseos sexuales eran sumamente violentos.
A pesar de esas acusaciones, Amaia no tiene una prueba a su favor, por lo que el juicio en su contra sigue en pie; en los próximos meses podría saber su condena por violencia de género.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario