Los cubanos desde siempre han tenido una presencia destacada en nuestra televisión .
No es ahora, como algunos piensan, pues si nos remontamos a la primera etapa de la televisión criolla encontraremos al formidable locutor cubano Luis Acosta Tejeda, quien era parte del staff de La Voz Dominicana, y la principal voz de la radio constitucionalista durante la revuelta de abril de 1965 en el edificio Copello de la calle El Conde.
Un locutor noticioso y comercial que trazó pauta en su época.
Pero también los cubanos fueron pioneros de los programas infantiles en dominicana con verdadero auge.
Abel Barrios trajo al país al Abuelito Cantarín en los años sesenta, con el programa El Club de los Nietos, donde la empresa que lo producía asociaba a millares de niños en todo el país.
Los socios eran los nietos del Abuelito Cantarín con su canción del abecedario.
En ese programa se hacían concursos y se obsequiaban regalos, en medio de una producción muy pocaresca y divertida.
El Abuelito Cantarín hacía acopio de frases y refranes que rapidamente se convirtieron en expresiones del argot popular que la gente empleaba en su lenguaje coloquial como la muletilla “buchi buchi bombó” , verdad que chi?, “la niña va ganando...el niño va perdiendo”.
El Club de los Nietos era un verdadero toque de queda, que hasta los manganzones adultos veían.
El Club de los Nietos también lo hizo Abel Barrios en Venezuela donde se quedó a vivir muchos años, y también alcanzó gran éxito.
Eso fue en los años sesenta, porque en los setenta entró entonce en acción
El Sheriff Marcos, caracterizado por Marcos de Córdoba, otro cubano.
Los primeros programas que hizo Marcos fueron Teletalentos y Circolandia en Radiotelevisión Dominicana, que era el canal número uno del país en esa época.
El que lo consagró sin embargo fue el de “El Sheriff Marcos” por Color visión, programa que hizo desde el 1971 hasta el 1984 y los sábados “El Oeste de Marcos” de 2:00 a 4:00.
Los padres llamaban por teléfono al Sheriff para dar queja de los niños que se portaban mal en la casa o en la escuela. El Sheriff los amonestaba como parte de un juego que en esta época parecería pendejísimo, pero que contribuia a alimentar la imaginación infantil en aquellos años.
De ese programa surgió la célebre Nuria Piera, hoy día una de las comunicadoras más temida y a la vez valorada por los trabajos de denuncia y de investigación en su programa Nuria.
El Sheriff se sentaba en las piernas a la bella niña rubia que desde muy pequeña ya daba demostración de su talento.
Hay que decir que en la historia de los programas infantiles sustentados por extranjeros, también vale mencionar las producciones de los argentinos Horacio Lamadrid y Anita Ontiveros, (pioneros en producciones de amplio impato los fines de semana, como fueron Domingo de mi Ciudad, primero que El Gordo de la Semana, y luego Sabado de mi Ciudad.)
A ellos correspondió aquel célebre programa infantil denominado “La Casa de Pequita” , en el que también se destacó sobremanera la niña Nuria Piera.
Publicado por Joseph Caceres
1 comentario:
Una vez cuando yo vivía en el distrito era una niña fui al programa que ella tenia en Rahintel. Ella también era una niña, recuerdo que participe en un concurso no recuerdo bien de que se trataba. Me gustaría ver ese momento. Se que es un imposible, estabamos las dos muy niñas, yo era mas niña que ella.
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