¿Cómo intuye que hubiera sido su carrera sin «Star Wars»?
Yo siempre asocié mi éxito al hecho de estar involucrado en producciones que fueran pasadas de generación en generación, y eso pasa por el valor de las historias que contamos. Es maravilloso formar parte de historias inspiradoras, que alienten los aspectos positivos de la vida.
¿Qué cambia?
Cambió mi vida en todo sentido. Fue el principio de un increíble paseo. Bueno, tampoco fue el principio. Con George (Lucas) ya habíamos filmado «American Graffiti», pero yo había vuelto al trabajo de carpintería hasta que él apareció una vez más para quitarme mis herramientas y ponerme a trabajar como actor en un evento extraordinario que todos celebramos.
Lucas volvió a elegirlo para «Star Wars» cuando no les había ido demasiado bien con «America Graffiti».
Yo estaba instalando una puerta para Francis Ford Coppola, haciéndole un favor. Pedí hacerlo por la noche, porque no quería que la gente estuviera pasando todo el tiempo. Y una mañana, cuando estaba terminando el trabajo, entró George Lucas con Richad Dreyfuss. Intuí que era una entrevista para una producción nueva de ciencia ficción. Me saludaron, empezamos a hablar... Yo estaba trabajando, ganándome la vida. Por suerte, he podido seguir haciéndolo.
¿Qué tiene de especial «Star Wars» para durar 40 años?
Se puede tener el elenco más brillante del mundo, pero se necesita una historia para contar, y la historia que nosotros teníamos era más que suficiente. Tenía humor, emoción y conflictos, además de un invento brillante de la mitología que sostuvo el interés todo este tiempo. Si no tienes una historia que contar, es mejor quedarse en casa.(\
Fuente ABC
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