Tal parece que la joven actriz Lindsay Lohan (de 25 años) no está nada conforme con lo que la naturaleza le dio, y menos después de los estragos que han causado tantos años de excesos, pues ahora se sometió a una cirugía para verse más joven, aunque el resultado es bastante debatible.
Ahora que Lindsay lucha por retomar su carrera, tras muchos problemas por sus juergas, adicciones y líos legales, decidió experimentar con un nuevo tratamiento: rellenar su cara con grasa para que luzca más juvenil.
Lo que en realidad logró fue verse muy hinchada y casi irreconocible, pues el "efecto almohada" de este tratamiento la dejó con mejillas regordetas, mentón abultado y los labios a punto de explotar.
Aunque la intención era que su rostro tuviera una apariencia más fresca, parece que el retoque no resultó como ella esperaba, y aunque intentó huír de los paparazzi, ellos lograron captarla.
Lo único que queda es esperar para ver si baja la inflamación y cómo queda al final, pues no estamos seguros de que esta nueva cara sea la que quieren los productores para la protagonista de la película 'Liz and Dick', sobre la vida de Elizabeth Taylor.
fuente TV notas
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