domingo, 21 de junio de 2015

La “guerra con balas de salva” en la que se han enfrascado, el bachatú Anthony Santos y Frederick “El Pacha” Martínez.

Por Miguel Melenciano

Hola Joseph te escribo para exponerte mi parecer en la guerra con balas de salva, entre Anthony Santos y el Pacha, y es que en la República Dominicana cada cierto tiempo se pone de moda algo nuevo. 

Desde que el empresario Félix Cabrera por el año 2010, defendiera con dientes y uñas su honra de hombre, que nunca se ha visto ligado, ni mucho menos involucrado, en asuntos que tengan que ver con el lado oscuro de la justicia, y osara interponer una demanda en los tribunales norteamericanos en contra de la emisora Z 101 por difamación e injuria, de ahí en adelante, se ha desatado una ola de demandas judiciales de dominicanos en los tribunales americanos.

Demanda ésta que, si bien fue tranzada por las más altas instancias del poder político dominicano, desde el entonces presidente del país, líderes de los principales partidos políticos, hasta el sector empresarial e instituciones de la sociedad civil, valió para crear un precedente histórico y de control, en lo que se dice -sin fundamento- de cualquier ciudadano en los medios radiales, internet televisivos, o escritos.

No fue un acto farandulero esta demanda judicial. Constituyó un acto serio, fundamentado en evidencias legales, que dejaban bastante claro, y ponderadamente, la falta que se había cometido en contra del empresario Félix Cabrera. De ahí en adelante -con todo el derecho que les asiste- los dominicanos, aquí y allá, han asumido la tarea de demandar por cualquier quítame esta paja, asumiendo esto, muchas veces, como un acto chantajista y de presión, otras veces “en busca de sonido”.

Todo lo arriba escrito, es para referirme a la “guerra con balas de salva” en la que se han enfrascado, el bachatú Anthony Santos y Frederick “El Pacha” Martínez. No sé, quién carajo está asesorando legalmente a Anthony Santos en este asunto sin fundamento, es increíble el disparate en que se fundamenta la susodicha demanda, para molestar a os jueces de la cortes de Nueva York. Veamos;

“Por un incomodamiento de Anthony Santos con el Pachá, porque este dijo en una entrevista a Raulín Rodríguez, que Santos, estaría buscando el perdón de éste, y lo abrazaría en un concierto que tenía al efecto, y que eso estaba grabado en video”. Esto incomodó a Santos, quien decidió entablar la demanda. Esta declaración del Pachá, alega Santos, le causó “pérdidas económicas, lesiones personales, dolor y sufrimiento, miedo y, por consiguiente una invasión a mi privacidad”. Además, por la supuesta calumnia el cantante sintió “dolor psicológico, angustia emocional, angustia mental, vergüenza y humillación”.

Señores, si es verdad, que Anthony Santos, y sus “asesores’, depositaron en la Corte Suprema de New York, una demanda con estos pobres y ridículos alegatos, nosotros los dominicanos, nos convertiremos en el hazme reír de esta corte e iremos perdiendo credibilidad, y recordamos el caso de Vidal Cedeño, Fefita la Grande y Niní Taveras, el cual tenía alegatos más serios, y aun no se sabe en qué ha parado en los tribunales.

Pero, ¿y es que los “asesores” del bachatú no saben que en los programas de aquí se relaja hasta el presidente de la nación más poderosa de la tierra, su esposa y las hijas, y nadie se mete con eso, y el Jukeo de la Mega, al que pertenece el Pacha, Luis Jiménez Show, y el Vacilón de la Mañana son espacios de entretenimiento, en donde nadie sabe nunca, que es verdad y que es mentira, pues tienen la libertad de jugar con eso, con el objetivo de entretener?.

Le falta soporte legal a esa demanda, y los argumento en que se fundamenta son muy flojos, ya que tiene como medio de sustentación un chisme en un programa de farándula, por ende, puede generar una contra demanda del Pacha, la que se convertiría en seria, y que sí estaría respaldada por el hecho de Anthony Santos realizar una demanda temeraria, con el objetivo manifiesto de intimidar, coartar y lacerar la libertad de prensa y el derecho a entretener que tiene el programa el Jukeo y sus animadores.

Algo positivo que logró Anthony Santos, es que salió en un medio escrito en el idioma inglés, una nueva exigencia a las agrupaciones musicales que solicitan visa para trabajar en los Estados Unidos. Pero no loa desanimo, sigan haciendo ese ejercicio, total, al Pacha lo que le gusta es sonar, y ustedes se la están poniendo en las manos.

Y si no me equivoco, el Pacha seguirá insistiendo, para continuar con el ruido, e irá más lejos, hará cuantas demandas tenga que hacer, y moverá cielo, mar y tierra, para seguir con su mercadeo, que bastante resultado le ha dado, que no es malo de por sí, pues de ahí es que comen los Pachacitos.

No hay comentarios.: