A lo largo de sus 40 años de carrera, la imagen clásica de John Travolta apenas ha variado. El actor de éxitos como Grease y Fiebre del sábado noche ha hecho de su tupé, antes moreno y en los últimos tiempos algo más blanco, su elemento más reconocible.
Si bien es cierto que ha tocado su rostro con tratamientos estéticos, en muchas ocasiones por la exigencia del guion, ahora, a sus 64 años, el cambio está en su característica melena.
Porque ahora esa melena ha desaparecido por completo. Travolta ha decidido arrancar 2019 sin un pelo en la cabeza, como ha mostrado él mismo a través de sus redes sociales. Además, se ha dejado barba, más frondosa y alta de lo habitual, que aparece completamente blanca. También se le ve más delgado, con los pómulos más prominentes. Con un escueto mensaje en el que desea a todo el mundo un muy feliz Año Nuevo, el actor posa con su hija Ella junto a una copa de Martini —ya vacía— y un árbol de Navidad de fondo.
En un vídeo que publicó esta Navidad junto a su esposa, Kelly Preston, y sus hijos Ella, de 18 años, y Benjamin, de 8, para desear unas felices fiestas a su millón de seguidores, Travolta aparecía cubierto con una gorra bajo la que se intuía que no había pelo, algo que ha confirmado esta primera semana de enero.
Lo cierto es que hace meses que no se veía a Travolta, de ahí que su cambio físico haya llamado la atención. En 2018 realizó un par de películas que fueron estrenadas sin demasiado ruido, mientras que tiene otras tres pendientes. El pasado año apareció en apenas un puñado de actos públicos. El primero de ellos fue el festival de Cannes, a mediados de mayo, donde llegó acompañado de su familia al estreno de Gotti, una cinta sobre el criminal John Gotti. Una película para la que tuvo que ganar peso y transformar su rostro, en uno de los cambios más llamativos de su carrera.
Aparte de en esa ocasión, solo se le ha visto en público en otras tres ocasiones en 2018: en el mismo estreno de Gotti en Nueva York, en junio; en la celebración del 40º aniversario de Grease en agosto en California; y en un homenaje al cantante Pitbull el pasado diciembre. Entonces, todavía lucía su clásico tupé, similar al que tanto peinaba en Grease allá por 1978, solo que más canoso.
Porque ahora esa melena ha desaparecido por completo. Travolta ha decidido arrancar 2019 sin un pelo en la cabeza, como ha mostrado él mismo a través de sus redes sociales. Además, se ha dejado barba, más frondosa y alta de lo habitual, que aparece completamente blanca. También se le ve más delgado, con los pómulos más prominentes. Con un escueto mensaje en el que desea a todo el mundo un muy feliz Año Nuevo, el actor posa con su hija Ella junto a una copa de Martini —ya vacía— y un árbol de Navidad de fondo.
En un vídeo que publicó esta Navidad junto a su esposa, Kelly Preston, y sus hijos Ella, de 18 años, y Benjamin, de 8, para desear unas felices fiestas a su millón de seguidores, Travolta aparecía cubierto con una gorra bajo la que se intuía que no había pelo, algo que ha confirmado esta primera semana de enero.
Lo cierto es que hace meses que no se veía a Travolta, de ahí que su cambio físico haya llamado la atención. En 2018 realizó un par de películas que fueron estrenadas sin demasiado ruido, mientras que tiene otras tres pendientes. El pasado año apareció en apenas un puñado de actos públicos. El primero de ellos fue el festival de Cannes, a mediados de mayo, donde llegó acompañado de su familia al estreno de Gotti, una cinta sobre el criminal John Gotti. Una película para la que tuvo que ganar peso y transformar su rostro, en uno de los cambios más llamativos de su carrera.
Aparte de en esa ocasión, solo se le ha visto en público en otras tres ocasiones en 2018: en el mismo estreno de Gotti en Nueva York, en junio; en la celebración del 40º aniversario de Grease en agosto en California; y en un homenaje al cantante Pitbull el pasado diciembre. Entonces, todavía lucía su clásico tupé, similar al que tanto peinaba en Grease allá por 1978, solo que más canoso.
Fuente El Pais
No hay comentarios.:
Publicar un comentario