El impasse con los artistas urbanos!. Dicen tuvo su origen en el retraso provocado por el chequeo de sonido de artistas extranjeros .

Fuente Listin Diario

Picoteando el Espectáculo

El impasse con los artistas urbanos el domingo tuvo su origen en el retraso provocado por el chequeo de sonido de artistas extranjeros y que supuso como consecuencia la entrada tarde del público al Estadio Olímpico y el retraso de los tiempos establecidos para el show.

A las 4:00 de la tarde mucha gente estaba afuera esperando, mientras un urbano extranjero hacía ensayos. La hora pautada para comenzar el show era las 4:30 p.m. Mark B y El Mayor tendrían 20 minutos disponibles y Mozart media hora.

Cuando llegó la hora de iniciar, la producción cambió el esquema de presentación de los urbanos locales.

Según ellos, ya estaban tarde y para que no sucediera lo mismo del viernes como solución quisieron disminuir los tiempos de cada urbano local. Esto generó una crisis entre representantes de los intérpretes y los productores del evento.

Carlos Bautista, Ruddy Castillo (Gran Velero Record), Santiago Matías, Melvin de León y J. Joel encararon a Cayacoa Vargas, gerente de Cervecería y el responsable de la producción, quien le había comunicado la decisión del recorte de tiempo a Mark B, El Mayor y Mozart.

Mientras se discutía sobre las posibles soluciones del caso, pasaron unos 10 minutos y Cayacoa habría dicho que ya El Mayor no iba porque se le pasó el tiempo mientras trataban de solucionar el impasse.

Al anunciar que se iba a cancelar el show de El Mayor, representado por Gran Velero, los otros ‘managers’, en apoyo a éste, decidieron que no iban a subir tampoco, entendiendo que era un atropello al intérprete de “Se me llenan los bolsillos”.

En ese lapso de tiempo, Cervecería Nacional Dominicana ya había anunciado la cancelación del segmento urbano, lo que se evidenció en ese momento porque a las 5:40 la merenguera Milly Quezada empezó a cantar.

Los urbanos se iban a marchar del lugar y fue cuando apareció el ángel salvador: Melissa Martínez, ejecutiva de Cervecería, quien sí pudo conciliar con los representantes de Mozart, Mark B y El Mayor.

Una vez reunidos, en uno de los camerinos, se acordó que ellos iban a presentarse después que Ricky Martin concluyera su show. Y así lo hicieron, en lo que Cervecería denominó un “after party”.