LOS ÁNGELES. Mientras Hollywood está sumergida en las celebraciones del Halloween, Justin Bieber, el ex chico malo de la música se dedica a estudiar la Biblia. Aquí lo vemos llegar al servicio religioso en su vehículo, blanco como su reformada conducta, según se desprende de la forma como saluda a los chicos del valet parking.
Qué cercanía. Que amabilidad.
La biblia bien sujeta en sus manos y vamos rápido para adentro, donde nos esperan las enseñanzas del Sagrado Libro. Sin duda, el cambio de Bieber está durando más de los que creían algunos escépticos y parece que va en serio, por su forma de vestir. Ya no se le caen los pantalones. Esas gafas que le hacen lucir más circunspecto y sobre todo, como sujeta su biblia.
Nos preguntamos si Bieber se pasará a la música Gospel. Con este chico, nada es descartable.
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